'Roy Keane is about to have high blood pressure!': Fans are left bemused as former Real Madrid team-mates Casemiro and Luka Modric swap shirts at HALF-TIME of ...
Croatia faced off against Brazil in the quarter-final of the World Cup in Qatar.
For only the second time in their glittering careers, the two faced off as opponents, months after their partnership was ended after the Brazilian joined ...
LUKA MODRIC and ex-Real Madrid team-mate Casemiro couldn't wait until full-time to show what great pals they still are.The pair swapped shirts at half.
Former Real Madrid team-mates Luka Modric and Casemiro swapped shirts at half-time during the World Cup quarter-final between Croatia and Brazil.
Luka Modric and Casemiro swapped shirts as they headed down the tunnel at half-time in Friday's World Cup quarter-final clash between Croatia and Brazil.
Brazil and Croatia fought out a close battle in Friday's World Cup quarter-final in Doha with old Real Madrid colleagues Casemiro and Luka Modric meeting ...
El capitán de Croacia vive a los 37 años el mejor momento de su carrera, como en 2018, cuando escuchó que nunca volvería a jugar a ese nivel.
La filosofía de vida del nieto de Luka Modric, el 10 que se vengó del destino de una infancia destruida por la guerra, impresiona: [“Sé por experiencia que las mejores cosas de la vida nunca caen del cielo”.](https://elpais.com/deportes/2018/05/23/actualidad/1527084093_474299.html) Frase reveladora para quien pasó la infancia esquivando bombas. [Suscríbete aquí](https://plus.elpais.com/newsletters/lnp/1/477) a nuestra newsletter especial sobre el Mundial de Qatar [Dice Zvonimir Boban que la pregunta más importante](https://elpais.com/deportes/2020-05-24/la-patada-de-boban-que-entro-en-la-historia.html) que hay en el fútbol es la que se hace, durante todo el partido, Luka Modric: “En estos 90 minutos, a cada segundo que pasa, tenga o no el balón, ¿cómo puedo ayudar de la mejor manera al equipo?”. Un empleado del hotel de refugiados en el que pasó una época contó al diario 24sata de Croacia que Modric, de niño, [rompía más cristales con la pelota que las bombas serbias.](https://www.elmundo.es/deportes/2013/11/11/528033000ab74085738b457b.html) “Los bombardeos eran habituales, algunas cayeron en el hotel. Donde Modric aguantó de pie, a los 37 años, sosteniendo la bandera croata hecha jirones por la devastación del ataque brasileño incluso después del gol en contra de la prórroga; donde Modric, 1,72 metros y 66 kilos, se hizo tan omnipresente que su lección individual se pareció, en otro registro, pero ante el mismo rival y en la misma ronda, los cuartos de final, a la que hizo [al final de su carrera Zinedine Zidane en Alemania 2006.](https://elpais.com/diario/2006/07/02/deportes/1151791205_850215.html) Fue una exhibición de inteligencia y resistencia física que parece imposible no solo que aguantase los 120 minutos y marcase uno de los penaltis, sino que aún tuviese fuerzas para ejercer de capitán y consolar, uno a uno, a los jugadores brasileños. La respuesta de Modric a esa pregunta dejó a Brasil este viernes tiritando en la zona del campo que más duele, donde el juego se crea y se destruye. Al final de su biografía, Modric hace alusión a la edad que tenía en Rusia: 33 años. [Cuenta Modric en su biografía Mi partido (Córner, 2019), escrita con Roberto Matteoni, ](https://elpais.com/deportes/2020-07-12/el-partido-de-modric.html)que después de las palabras de Mandzukic y de los gritos de la afición, cuando bajó del podio con la medalla de subcampeón del mundo, se acordó de su abuelo Luka Modric, un pastor de ovejas y cabras de Zaton Obrovacki, pueblo del municipio de Jasenice, en Zadar. [convirtieron a los Modric en refugiados](https://elpais.com/internacional/2011/05/26/actualidad/1306360811_850215.html). “Mis padres me enseñaron que mi suerte en la vida dependería de lo cerca que estuviera mi familia”, dice en su libro, y cuando está en Croacia visita la antigua casa, que fue quemada, y los campos donde su abuelo sacaba a las ovejas y las cabras, a pocos metros de la ladera en la que era imposible jugar al fútbol. Ahí se acabó la vida feliz del niño Modric, a los seis años, y con ella su infancia: sacar a los animales con su abuelo, ayudar en la casa, huir de víboras que se encontraba en los barrancos, reírse con la historia de su abuela Jela, que al nacer él se vino arriba, bebió dos chupitos por primera vez en su vida, se empezó a marear y acabó ingresada en el hospital de Zadar por deshidratación, o sea, por resaca. [tras la eliminación de Brasil ante Croacia](https://elpais.com/deportes/mundial-futbol/2022-12-09/croacia-reina-en-el-mas-alla-y-derrota-a-brasil.html?ssm=TW_MX_CM) (“esto no es nada, saldrás más fuerte, te quiero, te quiero, hijo”), Mario Mandzukic buscaba en Moscú al propio Modric, que deambulaba con un nudo en la garganta por el campo con el trofeo de mejor jugador del Mundial buscando un lugar tranquilo en el que llorar.